domingo, 23 de septiembre de 2012

NOVIEMBRE DULCE

Hay ocasiones en las que una película no destaca por sus actores, por su historia o trama, por sus efectos especiales, pero, sin embargo, tiene detalles mágicos en su conjunto que la hacen pastelosa, romántica y con lección o moralina, muy al estilo de Hollywood.

Desde la primera media hora, surge la pregunta de ¿por qué hace esta chica todo esto? Y siempre, al igual que la pregunta, sobrevuela la respuesta ¡Estará enferma! Y vaya, es muy difícil equivocarse.

Creo que el peor momento de la película se halla hacia el final: la última media hora la haría prescindible por lenta...

Lo mejor de esta película se llama Charlize Theron. Y mira que no tiene por qué gustarme, pero sin embargo, es lo único junto con Jason Isaacs, que se salva de la quema. Duele decir que el guapo de Keanu Reeves no está ni acertado, ni siquiera cercano a lo que se busca de él. Empaca más su papel de ejecutivo horrible más que del enamorado pasteloso. Es un personaje muy plano, no se le encuentra evolución, lo que el papel de Sarah (Theron) sí le hallas esencia.

Las bandas sonoras, fuera de chirriar en algunos momentos de la película, están muy a la altura: Michael Bolton ("The center of my heart") y, sobre todo, Enya ("only time")... Estaba de moda, quizá ya algo decadente, en aquel año, pero lo principal es que sus melodías no pasan de moda... y casan a la perfección con momentos íntimos, cercanos, sencillos, amorosos...


"Noviembre Dulce" o "Sweet November" es un remake de 2.001 de una película de 1.969. Es el canto a varias cosas: la supremacía de la libertad por encima del tiempo, el canto al amor sincero y desinteresado, muy al estilo filosófico de Kant, la sencillez de los pequeños detalles que pueden coparlo todo y, por supuesto, el hecho de que todos nos merecemos una buena muerte, entroncada con la palabra dignidad. La mejor escena que da esencia a toda la película está al final, cuando Sarah dice a Nelson que no pueden seguir juntos porque no quiere que la recuerde sufriendo por la enfermedad, y si se despiden en ese momento, los recuerdos serán maravillosos.

Desde el primer momento, en que la ves robando a un perrito condenado a morir en un laboratorio, pasando por el paseo por la playa en la que está deslumbrante, comiendo helado, jugando a la gallinita ciega, escondiendo relojes y teléfonos móviles, dejando la TV apagada/estropeada porque ayuda a las plantas, regalando la ropa... evidentemente, ves en el personaje de Sarah una luz especial... a ella le gusta ayudar porque sí, en la esencia filosófica de "haz el bien, y no mires con quién".



Toda la película está cargada de romanticismo pasteloso, pero, en esencia, durante un mes, el personaje de Nelson debe estar con Sarah para cambiar la vida gris, aburrida, triste, estresante que lleva. En ese camino se enamora de la chica, se da cuenta que la vida se compone de algo más que vivir para trabajar, y que puede vivir los pequeños detalles de la vida como si fuera lo último.

En definitiva, no sé por qué... me gusta la película, pero Reeves bastante mejorable... Charlize Theron, envidiable... definitivamente, una obra para ver con alguien especial. Y eso que estuvieron nominados los dos protagonistas a los premios Razzies a los peores actores del año...

ANASTASIA

Se trata de una de las joyas de Fox, que consiguió rivalizar con la todopoderosa Disney, y que incluso optó a dos Oscar, a las mejores melodías y la mejor canción.
Cartel de la película original 
Gran Duquesa Anastasia Románov, personaje histórico que inspira la película

Se trata de la archiconocida historia de la última descendiente de la familia Románov, que durante 300 años reinó en Rusia, y que por desgracia, durante 1917 perecieron víctimas de la represión comunista. La génesis de la historia se sustenta en el hecho histórico de que la más pequeña de las hijas del matrimonio del zar Nicolás II y Alexandra, llamada Anastasia, escapó de la masacre y, con el tiempo, se fraguó la leyenda urbana de que todavía vivía. Las evidencias históricas han hecho caer el mito, al encontrarse en una segunda fosa los restos de Alexei y Anastasia, los dos más pequeños de la familia Románov en 2007.

Escena del principio, en la que Anastasia sale del orfanato y se encuentra a su inseperable amigo, el perrito.
Pero lo que nos ocupa aquí no son las críticas históricas, que las hubo en 1997 cuando se estrenó en Nueva York. Nos ocupa la estética de una película exquisita, cercana, amable y ciertamente tierna.

En primer lugar, destacaremos que es una película inspirada en los musicales, tan en boga en la época. "El Rey León", "La Sirenita" o "La Bella y la Bestia" son parangones de Disney. En función de esas obras, esta película entronca con las anteriores. Es una pena que no haya sido más explotada.

Sueño de Anastasia en el que baile con su padre, el zar Nicolás II.
Fue muy rentable, en el sentido que insufló una importante suma a la factoría, y es de esas raras joyas que no se vuelven a repetir. La factoría Fox no invirtió en esta línea, y mal que pesó en el hecho que podrían haberse convertido en serios rivales para Disney.

Interesante es el desarrollo de la historia: desde Rasputín -grave anacronismo de la historia real, pero en la película altamente tierno, fuera de ser malo-, Bartok, su incomparable compañero murciélago que protagonizó un spin-off (El magnífico Bartok), Dimitri (el cazarecompensas que acaba enamorado de Anastasia), el perrito, la incomparable Anastasia que entronca con las heroínas de toda la factoría Disney y que puede equipararse a una princesa.


Escena del final: enfrentamiento de Anastasia y Rasputín.
Los actores que dieron vida a los personajes no tienen tampoco desperdicio: Angela Lansbury, John Cusak, Meg Ryan. Resulta incomparable que una película por la que no se apostaba nada, haya sido tan rentable. Aún hoy, se quiere hacer una versión libre en otra película, con el desarrollo de la historia de esta entrañable película de dibujos.

Sueño de Anastasia, en el barco.
Algún detalle malo? Que haya demasiados números musicales que diluyen en ocasiones lo oportuno de la historia. Detalles buenos? Los gráficos, muy acertados para 1997 y los detalles máximamente cuidados (obsérvese el 300 en la lámpara de la escena inicial, claramente explicado por la voz narradora de Ángela Lansbury). El detalle de la caja de música y el collar con la leyenda "Juntas en Paris- Together París" da a la historia un sentido circular, pues desde el principio sabemos que la historia acabará en París.


Anastasia toma clases por su condición de Duquesa, en el viaje a París.